Por favor coloquen toda su atención en esta frase: “El falso líder tiende a rodearse de personas con menos conocimiento pues solo así logrará que nadie le haga sombra”.
Hablar del crecimiento de una empresa o una entidad en su totalidad no es hablar solamente de quienes son los voceros pues estos ya traen unos argumentos muy bien escritos, unos excelentes guiones ya aprendidos para dejar en la mente de todos como el tope de lo maravilloso pero, olvidamos lo más importante y es quienes trabajan los hilos de esta construcción; esos mandos medios que de nuevo llegan a las sedes administrativas y como el pez globo están inflados de poder, de dirección y apoyo pero son débiles en su formación y más aún en su preparación para trabajar con y para la comunidad así que acá tengo unos aportes para que cuando lean este artículo primero reconozcan en qué parte están y sobre todo si realmente tienen un excelente equipo de apoyo o recibieron lo que les dijeron debían recibir y “a ver qué pasa”.
Si en tu equipo tienes personas sinceras, proactivas, motivadas y que aman su puesto te juro que tienen más valor que cualquier mentiroso y acomodado pero talentoso, esos son armas de doble filo.
Un buen director dirige y guía no manda u obliga, inspira entusiasmo y no miedo, dice y agradece en nombre del equipo no de manera personal, se preocupa por las personas y la comunidad no por conservar el cargo que con tanto “sacrificio” logró conseguir, sostiene desde su primer día un equipo de trabajo y no mantiene cambiando de empleados y por último distribuye el trabajo para que cada día tenga su importancia y no sus urgencias.
Grande es aquel que para brillar no necesita apagar la luz de los demás y más grande es aquel que aprovecha esa luz y la une a la propia para generar un inmenso resplandor eterno que permita encontrar el faro que nos sepa guiar.
Está comprobado que el cambio necesita esfuerzo y es aquí donde muchos ya desde la lectura le tendrán pereza al proceso y que “en tierra de ciegos el tuerto es rey” pero esto sucede solo si dejamos que todo lo malo al verlo nos haga cerrar los ojos, agachar la cabeza o volteemos nuestra mirada porque si lo hacemos, esto tiene un nombre y es INDIFERENCIA.
Jorge Sierra Alzate
Líder Certificación Internacional Coaching con P.N.L
Human Ecology
coaching@coachehe.com
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